Manzanilla deshuesada sabor anchoa (350 g)

Las aceitunas de mesa reúnen los cuatro sabores básicos que detecta el paladar, es decir, dulce, salado, ácido y amargo lo que le da una versatilidad en la cocina única y sin límites más allá de la habilidad del cocinero y su toque para combinarlas en infinidad de recetas culinarias.

Dada la gran cantidad de variedades existentes y formas de elaboración es uno de los ejes de la cocina mediterránea y uno de los alimentos más polivalentes del mercado.

Historia y origen de la aceituna

La aceituna es el fruto del olivo y esta planta procede de Grecia y Asia Menor donde a día de hoy aún podemos encontrar bosques de olivos silvestres que crecen sin el alineamiento típico de las plantas cultivadas.

Tuvo gran importancia en la cultura romana, árabe y fenicia.

Aunque inicialmente se utilizaba para la extracción de aceite existen referencias del siglo I en las que ya se nombra su consumo directo.

Este cultivo milenario se extendía ampliamente por toda la zona mediterránea que abarcaba Europa, África y Asia Menor. En América se introdujo en el siglo XIV por colonizadores españoles como es el caso de otras muchas plantas.

En la Biblia hay alrededor de 400 menciones al olivo o su aceite.

Los primeros documentos escritos sobre el olivo proceden del reinado del rey Mino en el 2.500 a.C. que dan dejan constancia de la importancia del aceite de oliva para la economía cretense. Tanto el fruto, sus ramas y el propio olivo aparecen en multitud de jeroglíficos egipcios.

En la cultura griega el olivo es fruto de origen divino, símbolo de paz y sabiduría.

La gran expansión del olivo se debe al imperio romano.

España es líder en producción de aceitunas

La aceituna era un componente básico en el sustento diario de jornales andaluces y extrmeños durante los siglos XIX y XX.

A finales del siglo XIX comenzaron a cultivarse a escala industrial las primeras aceitunas de mesa en España, las denominadas “sevillanas o verdes al estilo español” en la provincia de Sevilla y más en concreto en localidades como Dos Hermanas o Alcalá de Guadaíra entre otras.

Desde entonces España es el principal productor y comercializador a nivel mundial superando ya las 8 millones de toneladas anuales pues nuestro país cuenta con gran variedad de olivas muy apreciadas en otros países.